A mis nietos y nietas


Si a vuestro paso habéis dejado caer alguna
espina, regresad, arrancadla y en su lugar sembrad
una rosa.

Vuestra abuela que os quiere tanto...


sábado, 12 de octubre de 2013

Estudio y explico filosofía a mis nietos


¿Por qué le gustará a Javier saber tocar la guitarra
 y no le gustará saber algo de fotografía?


Algunos de vosotros, mis queridos nietos y nietas, habéis empezado este curso a estudiar filosofía. Os sucede lo mismo que me sucedió a mí, cuando por primera vez abrí mi libro de texto de filosofía: no entendía ni patata.
Bueno, el caso es que me llamáis por teléfono para leerme textos y que os los explique. Así que, como muchos nietos y abuelos se encontrarán en idéntica tesitura, voy a  intentar dar respuesta a las preguntas que hasta ahora llevamos en cartera.

1ª. Pregunta: Qué es la filosofía.    
Lo más sencillo sería deciros que la filosofía es amor a la sabiduría, al estudio, al saber. Y ya estaría contestada la pregunta que, fácilmente podéis encontrar en cualquier diccionario, pero quiero que sepáis algo más.
Los seres humanos tenemos todos un deseo natural que nos brota constantemente ante cualquier cosa que conozcamos o intuyamos: el deseo de saber, de entender, de preguntarnos sobre eso que hemos conocido o intuido. Por ejemplo: todos ya me habéis preguntado cientos de veces cosas como estas: ¿Existe Dios? ¿Qué pasa cuando nos morimos? Ramón, cuando tenía  cuatro añitos, me dijo un día: ¿por dónde se entra a la casita del cielo?
Preguntas que nos hacemos todos porque deseamos saber.
 Pero no todo en la vida consiste en saber, porque la vida es también deseo de hacer cosas. ¿A que siempre tenéis en la cabeza algo que os gustaría hacer o que debéis hacer?
¿Qué sucede? Pues que hay saberes que nos interesan y tratamos de profundizarlos, estudiarlos, etc. porque nos  van a servir para hacer cosas que  deseamos, pero hay otros  saberes que no nos interesan, que pensamos que no nos sirven para satisfacer nuestros deseos u obligaciones y un saber que no sirva para nada, pues que lo echamos al saco del olvido o indiferencia. Por ejemplo, si un zapatero me quiere explicar cómo se hacen unos zapatos, yo podría contestar: eso a mí no me va a servir para nada. Luego no lo quiero saber. Por el contrario, si alguien me quiere enseñar cómo conseguir mejores fotos, ¡pues que me interesa muchísimo puesto que la fotografía me encanta! Y pondría en ese saber todo mi interés. ¿Entendéis?
Algunos filósofos dicen que la Filosofía “no sirve para nada”, y seguro que vosotros también lo pensáis, pero esto es falso, porque todo, todo lo que sea saber puede servir para mucho. Veamos la siguiente pregunta.

2ª Pregunta: ¿Y para que nos sirve la filosofía?
  Aunque de momento no veamos para que nos pueden servir algunos conocimientos, como el de hacer zapatos, por seguir con el ejemplo, todo saber sirve para mucho. A lo mejor no de una manera inmediata, y desde luego, no para saber cómo se construyen las casas, puentes, zapatos, armarios, etc.  


La filosofía no trata de enseñar a hacer zapatos, ni casas, ni cosa alguna de ese tipo, pero es capaz de descubrir, y esto es muy importante, el por qué es conveniente fabricar zapatos, levantar puentes o llegar a la luna.  Quiero  decir que sin la filosofía no conoceríamos el "sentido" último del por qué de todo e incluso de aquello que aparentemente no nos  interesa, no deseamos conocer.
En fin, mis queridos nietos la filosofía nos invita, desde la razón y el pensamiento a la reflexión sobre el mundo, sobre la vida, sobre nosotros  mismo y los otros, y trata de responder de manera racional, critica, constructiva, ordenada las grandes interrogantes del hombre como las siguientes: ¿Quien Soy?; ¿Cual es la finalidad de mi vida?  ¿Para  que trabajar?
¿A qué todo eso os interesa? ¡Claro que sí! Y seguro que  os habéis hecho ya, como en el caso de Dios, esas preguntas, ignorando que  vuestros pies pisaban ya el territorio  de la filosofía.
Por eso, aunque sepamos muchas matemáticas, ciencias, etc. que nos interesan y  pueden servirnos para algo, no nos conocemos, es decir, somos unos desconocidos para nosotros mismos y no sabemos siquiera para qué hacemos lo que hacemos. Por eso necesitamos   saber, no sólo aquello que nos gusta o puede ser de utilidad material para nuestros deseos, sino saber para qué sirve el saber que aparentemente no tiene utilidad.
Bueno, pues para eso sirve la filosofía.

RESUMIENDO:
Esta dos primeras preguntas las podéis resumir de esta manera.
1ª Pregunta: ¿Qué es la  filosofía?
Es amor a la sabiduría, al estudio, al saber.

2ª Pregunta: ¿Para qué sirve la filosofía?
La filosofía  sirve para responder al deseo de saber, que brota naturalmente del ser humano y tiene el objetivo fundamental de enseñarnos a pensar, a discurrir con la cabeza, a formar criterio, a tener espíritu crítico y, por lo tanto, a tener personalidad, a saber discutir con argumentos y así evitar ser manipulados y engañados.  

Y seguiremos, mis queridos nietos y nietas. Espero vuestra siguiente pregunta y así estudiamos juntos. ¿Vale?