A mis nietos y nietas


Si a vuestro paso habéis dejado caer alguna
espina, regresad, arrancadla y en su lugar sembrad
una rosa.

Vuestra abuela que os quiere tanto...


viernes, 6 de noviembre de 2015

La educación es un valor

¡Ea, pues hoy vuelvo de nuevo a  compartir aquellas páginas de consejitos que os dediqué  ya hace... mucho! Y voy a empezar por refrescaros la memoria acerca de lo que es  un valor muy importante: la buena educación, algo que en vuestras casas  os enseñan, pero yo "machaco" que es una buena forma de  que aprendáis Y lo hago, como siempre de forma casi esquemática  
  Mirad esta foto  del otoño pasado. Mi Gabriel atiza la candela.

 Os doy consejitos muy resumidos. 
A los mayores, en general, y a los abuelos, en especial, hay que prestarle la atención debida, cuando hablan. Es horrorosa esa costumbre de exclamar, antes de escuchar: ¡que me dejes!
Los abuelos y abuelas, por lo general, han perdido con el paso de los años, oído, vista, memoria y muchas más cosas. Así que no le habléis a gritos, ni le digáis, estás sordo, estás ciego, estás empanado, etc. Bastante tienen con sus problemas y limitaciones para que alguien se los resalte y recuerde.
Siempre que veáis a un mayor  con algo de peso en las manos y notéis que le cuesta trabajo llevarlo, ofreceos a prestarle ayuda.
Si entráis o salís al tiempo que otra persona, sujetadle la puerta hasta que salga o entre.
Si estáis embebidos con los móviles y entra alguien a vuestra casa, aunque sea de la familia, dejadlo, levantaos y saludad.
A la hora de comer o de estar en familia, apagad los móviles. No es educación ausentarse del resto.
Cuando estéis en un lugar público, por ejemplo, comiendo, procurad hablar bajito y sobre todo no habléis todos a la vez.
Si vais en el autobús, por ejemplo, y sube alguien que se le ve discapacitado por edad o por cualquier otra cosa, y vais sentados, cededle el sitio.
Al cerrar una puerta, evitad portazos.
Si entráis a un servicio público, y por supuesto al de vuestra casa, dejadlo como quisierais encontrarlo. Ni un pelo en el lavabo, ni un papel por el suelo…
No miréis a nadie, por mucha curiosidad que os pueda despertad, con tanto descaro que la persona afectada se dé cuenta.
Evitar toda clase de ruidos corporales delante de los demás.
Y hoy termino, pero preparaos la que os espera. Quisiera que no solo fuerais educados sino  re-fi-na-dos.

¿Qué eso qué es? Educados súper. ¿Lo pilláis?